> SoydelaVirgen : 06/26/20

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26 de Junio: Memoria Litúrgica de san Josemaría Escrivá, presbítero



"Dios no te arranca de tu ambiente, no te remueve del mundo, ni de tu estado, ni de tus ambiciones humanas nobles, ni de tu trabajo profesional... pero, ahí, ¡te quiere santo!", decía San Josemaría Escrivá, fundador del Opus Dei y conocido como “el santo de lo ordinario”, quien hace 41 años partió al Cielo.

San Josemaría Escrivá de Balaguer nació en Barbastro (España - 1902) en una familia profundamente cristiana. De pequeño tuvo una infancia muy dura. Tres hermanas menores que él murieron siendo niñas, el negocio de su padre quebró y la familia tuvo que mudarse a Logroño.

Cierto día vio en la nieve unas huellas de los pies descalzos de un religioso e intuyó que Dios deseaba algo de él. Poco a poco fue aumentando su inquietud vocacional e ingresó al seminario. Más adelante estudió la carrera civil de derecho en la Universidad de Zaragoza.

Se caracterizaba por tener un carácter generoso y alegre, mientras que su sencillez y serenidad hacían que sea muy querido entre sus compañeros. Tenía mucho esmero en la piedad, la disciplina y el estudio, llegando a ser ejemplo para sus compañeros.

Es ordenado sacerdote el 28 de marzo de 1925. Años posteriores, con permiso de su Obispo, se traslada a Madrid para obtener el doctorado en derecho. El 2 de octubre de 1928, Dios le hace ver lo que quería de él y funda el Opus Dei.

En una ocasión San Josemaría definió al Opus Dei como “una movilización de cristianos que supieran sacrificarse gustosos por los demás, que hicieran divinos los caminos humanos de la tierra, todos, santificando cualquier trabajo noble, cualquier trabajo limpio”.

 En 1933 el Santo promovió una academia universitaria comprendiendo que el mundo de la cultura y la ciencia es un punto importante para la evangelización de toda la sociedad. Al estallar la guerra civil en 1936 se inicia la persecución religiosa y San Josemaría se ve obligado a refugiarse en diversos lugares hasta llegar a Burgos.

Acabada la guerra en 1939, retorna a Madrid y termina sus estudios de doctorado en derecho. Su fama de santidad se fue extendiendo y  dirigió muchos ejercicios espirituales a pedido de muchos obispos y superiores religiosos. En 1946 se traslada a Roma y obtiene de la Santa Sede la aprobación definitiva del Opus Dei.

Poco a poco se le fue encomendando cargos importantes en el Vaticano y sigue con atención el Concilio Vaticano II, relacionándose con muchos padres conciliares. Viajó por diversos países de Europa y América impulsando y consolidando el trabajo apostólico del Opus Dei.

"Allí donde están vuestros hermanos los hombres, allí donde están vuestras aspiraciones, vuestro trabajo, vuestros amores, allí está el sitio de vuestro encuentro cotidiano con Cristo", animaba San Josemaría.

Partió a la Casa del Padre el 26 de junio de 1975, a consecuencia de un paro cardíaco y a los pies de un cuadro de la Santísima Virgen de Guadalupe. Fue canonizado por San Juan Pablo II en el 2002.

Oración a san Josemaría Escrivá

Oh Dios, que por mediación de la Santísima Virgen otorgaste a San Josemaría, sacerdote, gracias innumerables, escogiéndole como instrumento fidelísimo para fundar el Opus Dei, camino de santificación en el trabajo profesional y en el cumplimiento de los deberes ordinarios del cristiano: haz que yo sepa también convertir todos los momentos y circunstancias de mi vida en ocasión de amarte, y de servir con alegría y con sencillez a la Iglesia, al Romano Pontífice y a las almas, iluminando los caminos de la tierra con la luminaria de la fe y del amor.

Concédeme por la intercesión de San Josemaría el favor que te pido... (pídase). Así sea.

Padrenuestro, Avemaría, Gloria.

Último Viernes del Mes del Sagrado Corazón de Jesús



En este último viernes de junio, fiesta de los Santos hermanos mártires Juan y Pablo, no dejemos de suplicar al Sagrado Corazón de Jesús, nuestro Redentor, Hermano y Amigo. Estas letanías, más antiguas que las que rezamos todos los días, las escribió el gran Apóstol del Corazón de Jesús San Juan Eudes, el primero en componer un oficio litúrgico para la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús.

"Te saludamos, Corazón amantísimo de Jesús y de María. Te alabamos, te glorificamos, te damos gracias. Te amamos con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma, con todas nuestras fuerzas. Te ofrecemos nuestro corazón: recíbelo, poséelo totalmente”. 
San Juan Eudes

Corazón divino de Jesús, Ten piedad de nosotros
Corazón amante y manso
Corazón humilde y misericordioso
Corazón del eterno Padre
Principio del Espíritu Santo
Corazón fiel a la divina Voluntad
Corazón de Jesús, Corazón de la Virgen Madre
Corazón herido por la lanza
Corazón sacerdotal
Fortaleza de los débiles
Refugio de los pecadores
Cordero encendido en el amor por el hombre
Alegría y esperanza de nuestro corazón
Corazón amado de nuestro corazón
Vida y norma de nuestro corazón

De todo pecado Líbranos, Señor
De la soberbia de la vida
De la ceguera del corazón
De la resistencia a la Gracia
Por tu amor infinito al Padre celestial
Por tu amor a María Virgen y Madre
Por tu amor a todos los hombres
Por tus eternos goces

Oremos.
Oh Dios, que por obra de tu amor nos hiciste miembros de tu único Hijo y nos diste tener con El un mismo Corazón, concédenos cumplir con amor tu voluntad, para que, deseando lo que te agrada, podamos ver cumplidos nuestros justos deseos. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.