> SoydelaVirgen : 11/23/20

--------------------------------------------- San Martin de Tours y La Virgen de los Buenos Aires / La Inmaculada Concepción y San Ponciano | Patronos de la Ciudad de Buenos Aires / Patronos de la Ciudad de La Plata -----------------------

23 de Noviembre: Fiesta de Nuestra Señora de la Consolación de Sumampa, patrona de Santiago del Estero (Argentina)

 


Nuestra Señora de la Consolación es venerada especialmente en todo el sur de la provincia de Santiago del Estero, de donde es Patrona, y en grandes regiones de Córdoba, Catamarca y Santa Fe. Su santuario, erigido hace 300 años, tiene prestigio nacional.

La imagen de nuestra Señora de la Consolación llegó desde Brasil junto a la imagen de la virgen de Luján(Bs.As.) Todos los 21 de noviembre se celebra su día en este santuario, al que concurre gente de todo el país, dando lugar a una fiesta muy original, donde se canta y baila durante los nueve días previos que dura la celebración. La virgen es patrona de los transportistas, entre los que están la mayoría de sus fieles, y es muy milagrosa.

La mayoría de los historiadores sostienen que la imagen de Nuestra Señora llego a Sumampa hacia fines de junio del año 1.630. La Santa Imagen debió ser depositada y venerada en la casa de Antonio Farias Saá; pero tan pronto fue posible, y terminadas las obras de la pequeña capilla o ermita, se llevó allí la imagen en una ceremonia extraordinaria de fervor y concurrencia. El traslado tuvo lugar en los últimos días del mes de noviembre de ese mismo año de su llegada. Al acto del traslado no faltaría sin duda el primer cura párroco de la región Don Juan de San Miguel y Arévalo, quien al poco tiempo fijaría su sede parroquial en este paraje, junto a la Capilla de Nuestra Señora, por creerlo el sitio más conveniente como punto y centro y misión de culto y fe.

Muy pronto también la santa imagen fue venerada con el titulo de Nuestra Señora de la Consolación, bien por una tradición o devoción familiar, bien por empeño o decisión diocesana; ciertamente la Virgen con su llegada había traído a estas tierras consuelo, gozo y paz.

Seguramente data de esos primeros comienzos del culto, y recordando la entronización de la Santa imagen en la ermita, la celebración de las fiestas patronales en el mes de noviembre.

La novena patronal comienza el día 11 de noviembre y concluye el día 19; los días 20, 21 y 22 se realiza un triduo solemne preparatorio y el día de la fiesta patronal en honor a nuestra Señora de la Consolación de Sumampa es el 23 de noviembre.

Breve reseña histórica

Un hacendado del pago de Sumampa quiso dedicar a la Virgen Santísima una capilla con este designio escribió a otro paisano suyo le mandase del Brasil un bulto o un simulacro de Nuestra Señora en el misterio del Inmaculada Concepción, para colocarla en dicha capilla que estaba fabricando. En virtud de este encargo se le remitieron desde Brasil, no una sino dos imágenes para que escogiese el que mejor le pareciese. Dicha capilla o ermita seria un humilde rancho construido con piedras, cal y barro y techo de paja. Pues la pobreza de esa región y la carencia de maquina para la construcción no daba para más.

A fines de junio de 1630 se cumple en Sumampa el gran milagro de Maria Santísima, la cual venera los presentes una imagen de nuestra Señora, pero ahí esta la maravilla: La imagen “aparecida” es del titulo de la madre de Dios con el Niño Jesús dormido entre sus brazos y no la pedida de la Inmaculada Concepción, que quiso quedarse en Luján a finales de noviembre es colocada en la capilla o ermita entonces terminada por la familia de Don Farias de Saa. Las fiestas patronales de noviembre recuerdan este hecho de la inauguración de la capilla.

En el año 1670 con la solemnidad se habré a los fieles de Maria Santísima llamado entonces Nuestra Señora de Consolación, por con la llegada la Santa Virgen trajo a estas tierras el consuelo, el gozo y la paz. En el sitio de la Capilla hay paredes de barro y cal el techo de tejereria y tejas con dos puertas de tablas, con sus herraduras dentro de ellas tres altares, el altar mayor un dosel de colchas y cielo raso verde y sobre el altar un tabernáculo de madera, todo un pintado al óleo, y dentro la imagen de Nuestra Señora de la Consolación, un sagrario y un sagrario de plata, dos campanas buenas y una quebrada. Todo el ornato de esta iglesia es dado de limosna de los que van a la romería de dicho Santuario. Es una descripción detallada del templo del Cura de Sumampa Diego de Corbalán en el año 1692.

El Santuario construido por mano de obra indígena fue refaccionado numerosas oportunidades y reconstruido por lo menos en 1782 únicamente nos consta que este año estaba arruinado y en estado de no poderse celebrar en el sino lo permitiera la necesidad y no haber otro recurso para el socorro espiritual de los fieles. Los fieles desean en gran manera la reedificación de dicho templo y ofrecen gustosos sus limosnas para ello ya por conservar la memoria de su antigüedad.

La fachada modificada en el trascurso del siglo IXX se levanta a ras con el tejado del techo que es en su totalidad de tejas, molduras muy simples que a maneras de jambas y dinteles contornean las aberturas, son reforzadas con guardapolvos curvos sobre las puertas.

El sencillo interior se compone de una sola nave de veintiséis varas y medio de largo y seis varas y media de ancho, el coro alto de tablazón y barandilla de madera, del ancho de la iglesia todo bien tratado, el altar mayor con nicho en la pared donde esta el Sagrario y arriba el nicho de madera de Nuestra Señora de la Consolación.

La agreste tierra Santiagueña conserva muy pocos restos de su pasado colonial. Un terreno suelto, salitroso y las periódicas inundaciones que tornan dificultosos mantener en buen estado las construcciones y el temblor que en 1817 derrumbo casas y templos, han hecho del Santuario del Nuestra Señora de la Consolación el único edificio en pie del periodo virreinal en toda la Provincia de Santiago del Estero.

El Santuario de Sumampa fue declarado monumento histórico Provincial por decreto acuerdo “A Nº11″ del 18-VIII-1972 y declarado monumento histórico Nacional por decreto Ley Nº 1180 del 12-XI-1973, como un testimonio de alta valoración histórica, arquitectónica, religiosa y cultural.

Títulos y Honores de la Virgen

Fueron otorgados por la Iglesia del Pueblo Santiagueño a la Virgen de la Consolación de Sumampa.
• Patrona de los transportistas (por haber recorrido un largo camino desde Brasil hasta Sumampa en diferentes medios de transporte, barco, carreta, lomo de mula, etc.) – 1983
• Patrona del Pueblo de la Provincia de Santiago del Estero – 1984
• Patrona de la Cultura de Santiago del Estero – 1995
• Patrona de los estanciero (pues fue un estanciero el que la trajo del Brasil)
• Patrona de la lluvia
• Madre de los humildes y desamparados
• Guardiana del Honor y la Dignidad Argentina
• Patrona de las escuelas y la policía.

Sumampa Viejo.

En el Noroeste Argentino, en la Provincia Santiago del Estero, en la localidad de Quebrachos se halla el pueblo Sumampa Viejo, distante de Santiago del Estero a 238 km., situado en un pequeño valle, rodeado de serranías bajas, y con un origen que se remonta a la segunda mitad del siglo XVI.

A 4 km. se ubica el santuario de Nuestra Señora de la Consolación de Sumampa. El 23 de noviembre, previo novenario, es la Festividad en honor a la milagrosa imagen que hiciera traer de Brasil Don Antonio Farías de Saa hacia 1630. Se realizan festejos religiosos y populares, con peregrinos de Córdoba, Santa Fe, Catamarca, Tucumán y Santiago. También se festeja la fecha de su llegada, el 25 de junio.



23 de Noviembre: Memoria Litúrgica de san Clemente I, papa y mártir

 


“Revistámonos de concordia, manteniéndonos en la humildad y en la continencia, apartándonos de toda murmuración y de toda crítica, manifestando nuestra justicia más por medio de nuestras obras que con nuestras palabras”, escribió el Papa San Clemente I en una carta escrita a los miembros de la Iglesia en Corinto.

San Clemente I, conocido también como Clemente Romano, fue elegido Pontífice en el año 88 y murió mártir en el año 97, cuando fue ejecutado. El Papa Clemente fue arrojado al mar encadenado a un ancla.

San Ireneo testificó en sus escritos la fidelidad de San Clemente a Cristo, dada su cercanía con los Apóstoles. “Había visto a los Apóstoles”; “se había encontrado con ellos”; “todavía resonaba en sus tímpanos su predicación, y tenía ante los ojos su tradición”, afirmaba sobre Clemente el gran obispo de Lyon. Por eso, la Iglesia lo considera uno de los Padres Apostólicos.

Durante su pontificado, Clemente I restableció el sacramento de la Confirmación de los cristianos según el rito de San Pedro, y se empezó a usar en el rito católico -universal- la palabra “amén” (“Así sea”, como señal de conformidad y adhesión expresada en la liturgia).

Asimismo, intervino sabiamente en muchos problemas de las comunidades cristianas, especialmente de las más alejadas de Roma. San Clemente dio orientaciones en la mayoría de los casos, mostrando la delicadeza de su espíritu y su preocupación pastoral. Sus cartas están llenas de esas orientaciones propias del buen pastor, consciente de ser el representante de Cristo en la tierra y de que un Pontífice está obligado a salvaguardar la unidad. Por ejemplo, debido a las desobediencias constantes de los corintios a sus sacerdotes, San Clemente hizo como San Pablo y les envió una carta. Dice en ella:

“¿A qué vienen entre vosotros contiendas y riñas, banderías, escisiones y guerras. ¿O es que no tenemos un solo Dios y un solo Cristo y un solo Espíritu de gracia que fue derramado sobre nosotros? ¿No es uno solo nuestro llamamiento en Cristo?... Arranquemos, pues, con rapidez ese escándalo y postrémonos ante el Señor, suplicándole con lágrimas sea propicio con nosotros, nos reconcilie consigo y nos restablezca en el sagrado y puro comportamiento de nuestra fraternidad”.

La fiesta de San Clemente I, cuarto Papa y tercer sucesor de Pedro, se celebra cada 23 de noviembre.